¿Eres propietario de una propiedad que has puesto en alquiler y te preguntas cómo declarar correctamente los beneficios obtenidos? ¡No te preocupes! Aquí te ofrecemos una guía fácil de seguir para que puedas cumplir con tus obligaciones fiscales de manera precisa y sin complicaciones.
- Reúne toda la documentación necesaria: Antes de comenzar, asegúrate de tener a mano todos los documentos relevantes, como los contratos de alquiler, recibos de pago, facturas de gastos asociados y cualquier otro documento que respalde tus ingresos y gastos por concepto de alquiler.
- Calcula tus ingresos brutos por alquiler: Suma todos los pagos recibidos de tus inquilinos durante el año fiscal. Esto incluye el monto total de los alquileres mensuales, así como cualquier pago adicional por servicios o reparaciones.
- Identifica tus gastos deducibles: Determina qué gastos asociados con el alquiler de tu propiedad son deducibles según la legislación fiscal vigente. Esto puede incluir gastos como el impuesto sobre bienes inmuebles (IBI), los gastos de comunidad, los intereses de la hipoteca, los seguros, reparaciones y mantenimiento, entre otros.
- Calcula tus ingresos netos: Resta tus gastos deducibles de tus ingresos brutos para obtener tus ingresos netos por alquiler. Este será el monto que deberás declarar en tu declaración de impuestos como ingresos por alquiler.
- Completa tu declaración de impuestos: Utiliza el formulario correspondiente de la Agencia Tributaria para declarar tus ingresos por alquiler. En la casilla 0102 de la Renta deberías poner todo lo que has cobrado por el arrendamiento. Sin reducciones y sin eliminar ningún gasto. En las casillas siguientes asegúrate de incluir todos tus ingresos netos y de proporcionar la información necesaria sobre tus gastos deducibles del alquiler. Gracias a ellos pagarás menos impuestos por alquilar tu vivienda.
Si arrendaste tu vivienda en el año 2023 a un inquilino que la utilizó como su residencia principal, solo deberás tributar sobre el 40% de los ingresos que generes de dicho alquiler. Este beneficio se deriva de la normativa del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que permite a los propietarios deducir el 60% de la carga tributaria sobre el ingreso neto obtenido por el arrendamiento.
Es importante cumplir con el requisito esencial de que la vivienda sea utilizada como residencia habitual del inquilino. Por lo tanto, los alquileres destinados a otros fines, como oficinas, locales comerciales o despachos profesionales, no son elegibles para esta deducción.
- Considera la proporción si hay copropietarios: Si compartes la propiedad con otros propietarios, asegúrate de declarar únicamente tu parte proporcional de los ingresos y gastos en tu declaración de impuestos.
- Mantén un registro organizado: Guarda todos los documentos y recibos relacionados con tus ingresos y gastos por alquiler en un lugar seguro y organizado. Esto te facilitará la declaración de impuestos en futuros períodos fiscales y te ayudará a estar preparado en caso de una auditoría.
¡Con estos simples pasos, podrás declarar tus beneficios por alquiler de manera correcta y cumplir con tus obligaciones fiscales sin complicaciones! Recuerda que siempre puedes consultar con Inmo Empire si tienes preguntas específicas o necesitas asistencia adicional. ¡No esperes más y asegúrate de estar al día con tus impuestos!